"No pido que te fijes en mí, no pido que voltees a mirarme... Sólo pido tus ojos, encontrarte en ellos, pido que me revelen tu corazón, pido que me hablen de ti, pido que por sí solos, me sonrían.
Lo sé, soy exigente. Pero si tan sólo me regalas tu mirada, tus ojos, prometo guardar el secreto de lo que hay dentro, en tu alma y corazón, prometo aceptarte, prometo no defraudar jamás tu confianza, y sobre todo, prometo permanecer contemplándolos, prometo amarlos, prometo amar tu corazón, prometo amar tu alma. No tengas miedo de revelarme lo que hay en ti... Prometo amarte sin condiciones, sin reservas, sin guardar una pizca de mi pasión, prometo amarte locamente... Dame la oportunidad de mirarte fijamente y entraré en el mar de tus sueños, en el río de tus anhelos, en el lago de tus miedos y te juro que aunque tenga que apostar mi vida no me detendré de navegar en ellos, prometo no descansar hasta ver tu sueño cumplido, prometo saciar tu anhelo, prometo tomar tus miedos y hacerlos míos, soltarlos al precipicio, prometo lanzarlos al vacío, prometo guardarte de ellos, prometo abrazarte, prometo ser tus pies cuando tus miedos te paralicen, prometo ser tu sostén, prometo ser tu aliento, prometo ser tu respirar y tu pensar, prometo no soltarte jamás.
Lo sé, soy exigente. Pero si tan sólo me regalas tu mirada, tus ojos, prometo guardar el secreto de lo que hay dentro, en tu alma y corazón, prometo aceptarte, prometo no defraudar jamás tu confianza, y sobre todo, prometo permanecer contemplándolos, prometo amarlos, prometo amar tu corazón, prometo amar tu alma. No tengas miedo de revelarme lo que hay en ti... Prometo amarte sin condiciones, sin reservas, sin guardar una pizca de mi pasión, prometo amarte locamente... Dame la oportunidad de mirarte fijamente y entraré en el mar de tus sueños, en el río de tus anhelos, en el lago de tus miedos y te juro que aunque tenga que apostar mi vida no me detendré de navegar en ellos, prometo no descansar hasta ver tu sueño cumplido, prometo saciar tu anhelo, prometo tomar tus miedos y hacerlos míos, soltarlos al precipicio, prometo lanzarlos al vacío, prometo guardarte de ellos, prometo abrazarte, prometo ser tus pies cuando tus miedos te paralicen, prometo ser tu sostén, prometo ser tu aliento, prometo ser tu respirar y tu pensar, prometo no soltarte jamás.
Un día, un día me mirarás y encontrarás en mí el anhelo de amarte con sinceridad, con pasión y bondad, con eterna alegría, y eterna paz... De lo que tengo te doy, y tengo un corazón que quiere amarte hasta el fin de mis días, y aún después de ellos, amarte hasta la eternidad en Él.
Déjame probar tus labios, y junto a ellos besar tu alma anhelo, ser uno en amor y deseo. Confía en mí, es amor del bueno y verdadero el que tengo para ofrecerte. Amarte desde mis raíces y entrañas es lo que quiero, y prometo amarte hasta el final con amor sincero".
Esta fue la carta que con lágrimas en los ojos le escribí.
Era yo misma, era mi corazón hecho papel, y mi alma hecha tinta.
Descansé al confesarle mi amor y demostrarle pasión en unas líneas que aunque efímeras puedan ser, porque las palabras se las lleva el viento, estas hasta el infinito llegan...